Explorar el interior de Portugal es adentrarse en un mundo de historia, cultura, y paisajes impresionantes que van desde montañas y castillos hasta pueblos medievales y vinícolas.
Esta región, muchas veces eclipsada por las famosas playas del Algarve o la vibrante ciudad de Lisboa, ofrece experiencias únicas y genuinas.
A continuación, te presentamos algunos consejos para descubrir los lugares más bellos y las actividades imperdibles en el interior de este maravilloso país.
1. Conoce el Valle del Duero y su Cultura Vinícola
El Valle del Duero, o “Douro”, es mundialmente famoso por sus viñedos en terrazas y sus paisajes montañosos a orillas del río.
Explorar esta región es ideal para los amantes del vino y la gastronomía.
No te pierdas la oportunidad de realizar un recorrido en barco por el río, lo que te permitirá observar las vistas espectaculares de los viñedos desde una perspectiva diferente.
También puedes visitar algunas bodegas para degustar el vino de Oporto, producido en esta región, y entender la importancia de la vinicultura en la cultura portuguesa.
2. Pasea por los Pueblos Históricos de Beira
Beira, situada en el centro de Portugal, es una región rica en castillos y pueblos medievales. Entre los más destacados se encuentran Sortelha, Belmonte y Monsanto.
Monsanto es particularmente famoso por sus casas de piedra integradas en enormes rocas, lo que le da un aspecto único.
En Belmonte, podrás explorar el legado judío de Portugal, ya que es hogar de una de las comunidades sefardíes más importantes del país.
3. Relájate en las Termas de Monfortinho
Para quienes buscan un momento de relajación, las Termas de Monfortinho, en la región de Castelo Branco, ofrecen una escapada perfecta.
Las aguas termales son famosas por sus propiedades terapéuticas y son el lugar ideal para descansar después de varios días de exploración.
Monfortinho cuenta con instalaciones modernas y tratamientos de spa que te dejarán renovado.
4. Explora las Montañas de la Sierra de la Estrella
La Sierra de la Estrella es la cadena montañosa más alta de Portugal continental y ofrece paisajes de naturaleza increíble y actividades al aire libre durante todo el año.
En invierno, la región se transforma en el principal destino para deportes de nieve en el país, mientras que en verano es perfecta para el senderismo y la observación de flora y fauna locales.
No te olvides de probar el queso Serra da Estrela, una delicia artesanal con denominación de origen que es emblemática de la región.
5. Descubre la Ciudad Histórica de Évora
Évora, una ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es una joya arquitectónica en el Alentejo.
Su centro histórico está lleno de monumentos romanos, como el Templo de Diana, y construcciones medievales, como la Catedral de Évora y la Capilla de los Huesos.
Esta última es particularmente famosa por su decoración realizada con huesos humanos, una experiencia única y un tanto macabra, pero que muestra el enfoque medieval de la vida y la muerte.
6. Explora las Aldeas de Pizarra en Lousã
Las Aldeas de Pizarra, ubicadas en la región de Lousã, son pequeños pueblos de montaña construidos casi en su totalidad con pizarra, lo que les da una estética oscura y encantadora.
Estos pueblos, como Talasnal y Casal Novo, ofrecen una mirada al pasado rural de Portugal.
Podrás disfrutar de caminatas entre el bosque, descubrir la cultura local, y probar platos tradicionales en los restaurantes rústicos de la zona.
7. Visita Tomar y el Convento de Cristo
Tomar es una ciudad histórica conocida por ser el antiguo bastión de los Caballeros Templarios en Portugal.
Su monumento más famoso es el Convento de Cristo, un impresionante edificio que combina arquitectura románica, gótica, manuelina y renacentista.
Pasear por Tomar es recorrer las huellas de esta legendaria orden de caballeros, y también descubrir una ciudad acogedora llena de encanto.
8. Sumérgete en la Naturaleza del Parque Nacional de Peneda-Gerês
El Parque Nacional de Peneda-Gerês es el único parque nacional de Portugal y se encuentra en el norte del país, en la frontera con Galicia.
Este parque es ideal para el ecoturismo y ofrece paisajes de ríos, cascadas, montañas y una variada fauna y flora.
Es un destino perfecto para quienes aman el senderismo, la observación de aves y el turismo rural.
Algunos senderos te llevarán a cascadas ocultas, mientras que otros te permitirán descubrir pequeños pueblos tradicionales.
9. Prueba la Gastronomía del Alentejo
El Alentejo es una región en el centro-sur de Portugal famosa por su gastronomía rica y sabrosa.
Prueba platos tradicionales como la açorda alentejana, un guiso de pan con ajo y cilantro, o el porco à alentejana, un plato de cerdo marinado con almejas.
Además, en Alentejo podrás degustar algunos de los mejores vinos del país en sus numerosas bodegas.
10. Explora Coimbra y su Universidad
Por último, Coimbra, una de las ciudades universitarias más antiguas de Europa, alberga la Universidad de Coimbra, que es Patrimonio de la Humanidad.
Visita la famosa Biblioteca Joanina, un espacio barroco impresionante con miles de libros antiguos.
Además, pasea por las estrechas calles del casco antiguo y experimenta el ambiente estudiantil que llena la ciudad.
Conclusión
El interior de Portugal es un tesoro de experiencias auténticas, donde cada región tiene algo único para ofrecer.
Desde rutas de vino en el Valle del Duero hasta castillos medievales y parques nacionales, el corazón de Portugal es perfecto para quienes buscan una experiencia de viaje más tranquila y cercana a las raíces culturales del país.